Nutrición:
Los dientes pueden reflejar el estado nutricional de un individuo durante su infancia. La presencia de ciertos defectos dentales, como la hipoplasia del esmalte (hoyos o surcos en los dientes), puede indicar períodos de estrés nutricional o enfermedades durante la infancia. Al estudiar la prevalencia y gravedad de estos defectos en los dientes bávaros medievales, los investigadores pueden inferir el estado nutricional general de los niños durante esa época. Además, el análisis de isótopos estables de los dientes puede proporcionar información sobre la dieta del individuo, incluidos los tipos de alimentos que consumieron y si tuvieron acceso a diversas fuentes de alimentos.
Migración:
Los dientes también pueden proporcionar pistas sobre la historia migratoria de un individuo. El análisis de isótopos de oxígeno de los dientes puede determinar la ubicación geográfica donde un individuo pasó su primera infancia, ya que la composición de isótopos de oxígeno del agua potable varía según las diferentes regiones. Al comparar la composición de isótopos de oxígeno de los dientes de individuos de la Baviera medieval con la de las fuentes de agua de la región, los investigadores pueden identificar inmigrantes potenciales y rastrear sus patrones de migración.
En resumen, los dientes pueden revelar información importante sobre la nutrición infantil y la migración en la Baviera medieval. Al analizar restos dentales de sitios arqueológicos, los investigadores pueden obtener información sobre la vida de los niños durante este período, incluidos sus hábitos alimentarios y patrones de movimiento.