1. Aberturas:El aire exterior ingresa a los espacios interiores a través de ventanas, puertas, respiraderos y grietas abiertas. Cuando los niveles de contaminación exterior son altos, estas aberturas permiten que los contaminantes se infiltren y se acumulen en el interior.
2. Sistemas HVAC:Los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) pueden aspirar aire exterior para circular dentro de un edificio. Si el aire exterior está contaminado, el sistema HVAC puede distribuir estos contaminantes por todo el ambiente interior.
3. Garajes adjuntos:Las casas y edificios con garajes adjuntos pueden experimentar contaminación del aire interior debido a las emisiones de vehículos, como monóxido de carbono y partículas. Estos contaminantes pueden filtrarse en las áreas habitables a través de paredes, huecos o grietas compartidas.
4. Infiltración de aire:Incluso en edificios bien sellados, el aire exterior puede infiltrarse a través de pequeños espacios alrededor de ventanas, puertas y otros materiales de construcción. Esta infiltración puede llevar los contaminantes del exterior al interior.
5. Suelo y fuentes de agua:Los contaminantes exteriores también pueden ingresar a espacios interiores a través de suelos o fuentes de agua contaminados. Por ejemplo, el gas radón, un gas radiactivo que puede provocar cáncer de pulmón, puede filtrarse desde el suelo hasta las casas.
Contaminantes exteriores comunes que pueden afectar la calidad del aire interior:
- Partículas (PM2,5 y PM10):son partículas diminutas, como polvo, humo y hollín, que pueden inhalarse hasta llegar profundamente a los pulmones y causar problemas respiratorios.
- Dióxido de nitrógeno (NO2):Un gas de color marrón rojizo producido por los motores de combustión y las centrales eléctricas, el NO2 puede irritar las vías respiratorias y empeorar las condiciones respiratorias.
- Ozono (O3):Formado por reacciones químicas entre la luz solar y otros contaminantes, el ozono puede provocar dolor en el pecho, tos y dificultad para respirar.
- Compuestos orgánicos volátiles (COV):son sustancias químicas emitidas por pinturas, disolventes, productos de limpieza y diversos materiales de construcción. Los COV pueden causar dolores de cabeza, irritación ocular y problemas respiratorios.
- Monóxido de carbono (CO):Un gas incoloro e inodoro producido por una combustión incompleta, el CO puede provocar dolores de cabeza, mareos e incluso la muerte en altas concentraciones.
- Plomo:Las partículas de plomo procedentes de emisiones industriales y de pintura con plomo pueden entrar en ambientes interiores y causar daños neurológicos, especialmente en los niños.
Mitigar el impacto de la contaminación exterior en la calidad del aire interior:
1. Mantenga puertas y ventanas cerradas:minimice la apertura de puertas y ventanas cuando los niveles de contaminación exterior sean altos. Utilice aire acondicionado o purificadores de aire para hacer circular y limpiar el aire interior.
2. Utilice purificadores de aire:instale purificadores de aire de alta calidad con filtros HEPA (aire de partículas de alta eficiencia) para eliminar los contaminantes del aire interior.
3. Selle grietas y huecos:selle los huecos o grietas alrededor de ventanas, puertas y otras aberturas para evitar la infiltración de aire exterior.
4. Mantenga los sistemas HVAC:mantenga y limpie regularmente los sistemas HVAC para garantizar que filtren los contaminantes de manera efectiva.
5. Reducir las fuentes de contaminación en el interior:utilice pinturas, productos de limpieza y materiales de construcción con bajo contenido de COV para minimizar las fuentes de contaminación en el interior.
6. Monitorear la calidad del aire interior:utilice monitores de calidad del aire para rastrear los niveles de contaminación interior y tomar las medidas adecuadas para mejorar la calidad del aire.
Si comprende cómo la contaminación exterior afecta la calidad del aire interior y toma las medidas adecuadas, podrá crear un ambiente interior más saludable y cómodo para usted y su familia.