Un estudio reciente de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) encontró que se proyecta que casi la mitad de todas las especies moverán sus áreas de distribución al menos 100 kilómetros para 2050. Esto incluye especies tanto de plantas como de animales, y se espera que las migraciones sean más pronunciado en las regiones tropicales y subtropicales.
Algunas de las especies que ya están en movimiento incluyen:
* La mariposa monarca, que está migrando hacia el norte de América del Norte en respuesta a las temperaturas más cálidas.
* El oso polar, que se desplaza más al norte en el Ártico en respuesta al derretimiento del hielo marino
* El pingüino emperador, que se está desplazando hacia el interior de la Antártida en respuesta a la reducción de la capa de hielo.
* La pika americana, que se está desplazando a mayores elevaciones en el oeste de los Estados Unidos en respuesta a las temperaturas más cálidas.
Las migraciones de estas especies están teniendo un efecto dominó en los ecosistemas de todo el mundo. Por ejemplo, la migración de la mariposa monarca está alterando la cadena alimentaria de las aves y otros depredadores, y la migración del oso polar está reduciendo la disponibilidad de alimento para otras especies del Ártico.
La migración de especies también está teniendo un impacto negativo en la economía. Por ejemplo, la migración del pika americano está reduciendo la cantidad de agua disponible para riego y energía hidroeléctrica en el oeste de Estados Unidos, y la migración del pingüino emperador está perturbando la industria turística en la Antártida.
La migración de especies es un problema grave que sólo empeorará a medida que el clima mundial siga cambiando. Necesitamos tomar medidas para proteger estas especies y ayudarlas a adaptarse al clima cambiante. Esto incluye reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, proteger sus hábitats y proporcionarles los recursos que necesitan para sobrevivir.