Los ecosistemas consisten en los animales, las plantas y las condiciones ambientales de un área. Los humedales, los manglares, los bosques lluviosos y los arrecifes de coral son ejemplos de ecosistemas. Los ecosistemas mantienen un equilibrio muy delicado. Diversas actividades humanas amenazan con alterar este equilibrio y destruir los ecosistemas del mundo.
Contaminación
La contaminación es una de las principales causas de la destrucción de los ecosistemas. La contaminación puede agotar los recursos y ahuyentar las poblaciones de animales locales. Las fuentes importantes de contaminación incluyen basura, emisiones de carbono, derrames de petróleo y pesticidas.
Cambio climático
El cambio climático continúa desempeñando un papel importante en la destrucción del ecosistema. El calentamiento global ha provocado un aumento de las temperaturas, los niveles del mar y la acidez del océano que perturban el equilibrio natural de un ecosistema.
Land Clearing
A medida que las poblaciones humanas aumentan, también aumenta la necesidad de desarrollar más tierras. Muchos ecosistemas se destruyen para despejar la tierra de urbanizaciones y carreteras, usos agrícolas y cría de ganado. <<> Muchos ecosistemas son ricos en recursos naturales como tierra rica en nutrientes, agua, árboles y combustibles fósiles. Los esfuerzos excesivos para extraer estos recursos como la minería, la tala y la extracción de petróleo contribuyen a la destrucción del ecosistema. Disminución de la población Los animales de un ecosistema son fuentes vitales de alimentos y control de la población. Muchas poblaciones de animales están disminuyendo debido a la sobrepesca y la caza. Los animales a menudo son cazados por sus valiosas pieles, plumas, cuernos y carne.