Características físicas:
* Topografía: Las pendientes empinadas, el terreno rocoso y las áreas montañosas hacen que sea difícil cultivar cultivos.
* Calidad del suelo: La mala calidad del suelo, como suelos arenosos, suelos de arcilla o suelos con bajo contenido de nutrientes, puede hacer que la agricultura sea desafiante.
* Clima: Las temperaturas extremas, las lluvias insuficientes y las sequías frecuentes pueden hacer que la tierra sea inadecuada para la agricultura.
* Disponibilidad de agua: La falta de acceso a agua suficiente para el riego dificulta el cultivo de cultivos.
Otros factores:
* Contaminación: La tierra contaminada con productos químicos o contaminantes puede ser insegura para la agricultura.
* urbanización: El desarrollo de áreas urbanas reduce la cantidad de tierra disponible para la agricultura.
* Áreas protegidas: Los parques nacionales, los refugios de vida silvestre y otras áreas protegidas a menudo están excluidos del uso agrícola.
Ejemplos de tierra no arable:
* Bosques
* Desiertos
* Humedales
* Montañas
* Áreas urbanas
* Tierra con mala calidad del suelo
Usos de tierra no arable:
* Recreación: Parques, rutas de senderismo y otras actividades recreativas.
* Conservación: Preservar la biodiversidad y los hábitats naturales.
* Forestry: Cosecha de madera y otros productos forestales.
* minería: Extracción de minerales y otros recursos.
* Desarrollo urbano: Construcción de casas, negocios e infraestructura.
Es importante tener en cuenta que la definición de tierra no arable puede ser subjetiva y puede variar según el contexto. Por ejemplo, algunas tierras pueden considerarse no sanables para la agricultura tradicional pero adecuadas para cultivos especializados o prácticas agrícolas alternativas.