Tanto la subducción como la propagación del fondo marino son procesos fundamentales en tectónica de placas , la teoría que explica el movimiento y la interacción de la litosfera de la Tierra (la capa externa rígida). Son esencialmente procesos opuestos , impulsando el ciclo continuo de creación y destrucción de la corteza terrestre.
Aquí hay un desglose de sus diferencias:
Subducción:
* Proceso: Una placa tectónica (placa oceánica típicamente más densa) se desliza debajo de otra (placa oceánica continental o menos densa).
* Ubicación: Ocurre en límites de placa convergente , donde chocan las placas.
* resultado:
* Formación de trincheras: Las partes más profundas del océano se forman donde se dobla la placa descendente.
* Volcanes y cadenas montañosas: A medida que la placa subducida se derrite, el magma se eleva a la superficie, creando arcos volcánicos y cadenas montañosas.
* terremotos: El proceso genera una fricción y estrés significativos, lo que lleva a terremotos.
Segurting en el fondo marino:
* Proceso: El magma del manto de la tierra se eleva a la superficie en las crestas del océano medio, creando una nueva corteza oceánica. A medida que se forma una nueva corteza, la corteza más antigua se aleja de la cresta.
* Ubicación: Ocurre en límite de placa divergente , donde las placas se separan.
* resultado:
* Formación de crestas del océano medio: Cierras montañosas submarinas donde se forma nueva corteza.
* Expansión de cuencas oceánicas: La nueva corteza empuja la corteza más antigua, expandiendo el fondo del océano.
* Rayas magnéticas: El campo magnético de la Tierra se invierte con el tiempo, dejando un patrón de rayas magnéticas en el fondo marino, proporcionando evidencia de la propagación del fondo marino.
En pocas palabras:
* subducción: Destruye la vieja corteza, formando trincheras y montañas volcánicas.
* Segurting: Crea una nueva corteza, en expansión de cuencas oceánicas y formando crestas en el océano medio.
La relación:
Estos dos procesos están interconectados, formando un ciclo continuo. La propagación del fondo marino crea una nueva corteza oceánica, que finalmente se subduce nuevamente al manto. Este ciclo ayuda a regular el calor interno de la Tierra y mantener su superficie dinámica.