1. Shale: El punto de partida es el esquisto bituminoso, una roca sedimentaria de grano fino compuesto principalmente de minerales y cuarzo de arcilla. Por lo general, es de color de color gris oscuro a negro y tiene una estructura en capas o plateadas.
2. Pizarra: Como el esquisto se somete a un metamorfismo de bajo grado (bajo calor y presión), se transforma en pizarra. La pizarra es una roca más densa, más dura y más fisible. Su fisilidad (la capacidad de dividirse en capas delgadas) se debe a la alineación de los minerales de arcilla bajo presión. La pizarra a menudo exhibe un brillo aburrido y se puede usar para techos y otros fines.
3. Phyllite: Con el aumento del grado metamórfico, la pizarra se transforma en filita. La filita se caracteriza por un brillo más pronunciado (a menudo descrito como "sedoso" o "satinado") causado por la alineación y el crecimiento de los minerales de mica. Por lo general, es grisáceo o verdoso y tiene una apariencia ondulada o arrugada.
4. Esquisto: Las temperaturas y presiones más altas hacen que la filita se metamorfosa en esquisto. El esquisto es una roca metamórfica de grado medio con una foliación distinta (capas paralelas de minerales) debido al crecimiento y orientación de cristales de mica más grandes. El esquisto puede ser varios colores y texturas dependiendo de los minerales específicos presentes.
5. Gneiss: Bajo los grados metamórficos más altos, el esquisto puede transformarse en gneis. Gneiss es un rock metamórfico de grano grueso con una apariencia con bandas o en capas. La banda resulta de la segregación de minerales de luz y oscuros durante el metamorfismo. Gneiss es típicamente fuerte y duradero y puede usarse para la construcción.
Consideraciones importantes:
* Contenido mineral: Los minerales específicos presentes en el esquisto influyen en la progresión metamórfica.
* Presión y temperatura: La intensidad y la duración del calor y la presión son factores cruciales que determinan la roca metamórfica final.
* Actividad fluida: La presencia de fluidos durante el metamorfismo puede acelerar las reacciones minerales y alterar la composición de la roca metamórfica.
En general, la progresión metamórfica de la lutita representa un proceso continuo de aumento del grado metamórfico, lo que lleva a cambios en la composición mineral, la textura y la apariencia.