He aquí por qué:
* rocas ígneas: Estos se forman desde enfriando magma o lava. Los ejemplos incluyen granito, basalto y obsidiana. El intenso calor y la presión asociados con el metamorfismo pueden transformar estas rocas en nuevas formas.
* rocas sedimentarias: Estos se forman a partir de la acumulación y cementación de sedimentos. Los ejemplos incluyen arenisca, piedra caliza y lutita. El metamorfismo puede hacer que los minerales dentro de estas rocas se recristalicen y cambien su textura.
* Otras rocas metamórficas: Sí, incluso las rocas que ya han sufrido metamorfismo pueden someterse a más calor y presión, transformándolas en diferentes tipos de rocas metamórficas.
El tipo específico de roca metamórfica que se forma depende de factores como el tipo de roca original, las condiciones de temperatura y presión, y la presencia de fluidos. Por ejemplo:
* Shale puede transformarse en Slate (metamorfismo de bajo grado), luego en esquisto (mediano), y finalmente en gneiss (alto grado).
* Limestone puede convertirse en mármol .
* arenisca puede convertirse en cuarcita .
Las rocas metamórficas son fascinantes porque nos cuentan una historia sobre las intensas condiciones que existían dentro de la corteza o manto de la Tierra. ¡Son un testimonio de la naturaleza dinámica de nuestro planeta!