1. Formación de intrusos:
* Magma Upwelling: La roca fundida (magma) se eleva desde las profundidades de la corteza terrestre, buscando áreas de menor presión.
* Intrusión forzada: El magma se abre paso a través de las capas de roca existentes, a menudo empujándolas hacia arriba. Esto crea una variedad de estructuras ígneas intrusivas como batolitos, alféizares, diques y laccolitos.
2. Erosión y meteorización diferencial:
* Erosión: Con el tiempo, la roca circundante (que puede ser menos resistente a la meteorización) se erosiona por el viento, la lluvia y otras fuerzas naturales.
* meteorización diferencial: Las rocas ígneas son generalmente más duras y más resistentes a la meteorización que las rocas sedimentarias. Esto significa que la roca ígnea intrusiva clima y se erosionará a un ritmo más lento que la roca circundante.
3. Formación de la colina:
* Intrusión expuesta: A medida que la roca circundante se erosiona, la intrusión ígnea más resistente se deja en pie por encima del paisaje. Esto crea una colina o montaña.
* Forma de la intrusión: La forma de la colina dependerá de la forma de la intrusión original. Por ejemplo, un laccolito (una intrusión en forma de domo) creará una colina en forma de cúpula.
Ejemplos:
* Stone Mountain, Georgia: Una gran intrusión de granito expuesta que forma una colina prominente.
* Half Dome, Parque Nacional Yosemite: Un gran batolito de granito expuesto que ha sido esculpido por la erosión glacial.
Excepciones:
* Intrusiones enterradas: Algunas intrusiones ígneas nunca alcanzan la superficie y permanecen enterradas debajo de la roca circundante. Estos no forman colinas.
* paisajes bajos: Incluso si se expone una intrusión, podría no formar una colina en un área plana o baja.
En resumen, las intrusiones ígneas pueden terminar como colinas debido a la combinación de su resistencia a la meteorización y la erosión de las rocas circundantes. Este proceso lleva mucho tiempo, a menudo millones de años.