1. Terremotos intraplacos:
* Transferencia de estrés: El estrés acumulado en los límites de la placa se puede transferir a otras áreas a lo largo de las fallas existentes. Imagine apretar una banda de goma:la presión no solo se queda en el punto que está apretando, sino que viaja a lo largo de la banda de goma. Esta transferencia de estrés puede desencadenar terremotos en regiones aparentemente estables.
* fallas preexistentes: La corteza terrestre contiene fallas antiguas que pueden haber formado miles de millones de años. Incluso si estas fallas ya no están directamente activas en los límites de la placa, aún pueden reactivarse por el inmenso estrés de las placas tectónicas que cambian con el tiempo.
* ruptitud continental: A veces, los continentes pueden separarse, creando nuevos límites de placas. Estos eventos de ruptura pueden desencadenar terremotos en áreas lejos de los límites de las placas existentes.
2. Terremotos inducidos por humanos:
* Inyección de fracking y aguas residuales: Estas actividades pueden cambiar la presión y el estrés en las formaciones subterráneas, a veces desencadenando terremotos. Esto es particularmente común en áreas con fallas preexistentes.
* Minería y construcción de presas: Las actividades humanas a gran escala también pueden alterar el estrés en la corteza terrestre, lo que lleva a terremotos en algunos casos.
3. Plumas de manto:
* Actividad volcánica: Las columnas de manto son columnas de roca calientes que se elevan desde las profundidades de la tierra. Estas columnas pueden crear estrés y causar terremotos en áreas lejos de los límites de las placas, especialmente en regiones con volcanes activos.
Es importante recordar que a pesar de que los terremotos pueden ocurrir lejos de los límites de las placas, son mucho menos frecuentes y generalmente menos potentes que los que ocurren directamente a lo largo de los límites de la placa.