* Erosión: Los senderos de montaña a menudo se tallan en las laderas, exponiendo la roca y el suelo subyacentes. El constante tráfico peatonal, la lluvia y el viento pueden causar erosión, que es el proceso de desgastar y mover el suelo y la roca.
* Material suelto: Incluso en senderos bien mantenidos, habrá un material suelto, como pequeños guijarros o polvo, que puede ser fácilmente desalojado por una pisada.
* Pendiente: Los caminos de montaña a menudo son empinados, lo que aumenta la probabilidad de que el material caiga.
Entonces, es completamente normal ver trozos de roca y tierra caída cuesta abajo mientras camina sobre un camino de montaña. ¡En realidad es un recordatorio de la naturaleza dinámica y siempre cambiante de las montañas!