Alaska está ubicada en el Anillo de Fuego del Pacífico, que es una región en forma de herradura alrededor del Océano Pacífico que alberga una gran cantidad de terremotos y volcanes. El Anillo de Fuego alberga aproximadamente el 90% de los terremotos del mundo y el 75% de los volcanes del mundo.
Nebraska, por otro lado, está situada en el centro del continente norteamericano, lejos de los límites de las principales placas tectónicas. Como resultado, es mucho menos probable que Nebraska experimente terremotos que Alaska.