1. Edad del fondo marino:
- A medida que la corteza oceánica se forma en las dorsales oceánicas debido a la actividad volcánica, con el tiempo se aleja de las dorsales.
- La edad del fondo marino aumenta a medida que se aleja de la dorsal. Esta progresión de edad se registra en las características geológicas del fondo marino, como el espesor de los sedimentos, la topografía del basamento y las anomalías magnéticas.
2. Inversiones magnéticas:
- El campo magnético de la Tierra sufre inversiones periódicas, donde los polos magnéticos cambian de posición.
- A medida que se forma nueva corteza oceánica en las dorsales oceánicas, ésta registra la polaridad magnética de la Tierra en el momento de su formación.
- El fondo marino conserva un registro de estas inversiones magnéticas en bandas alternas de rocas magnetizadas de forma normal e inversa.
3. Anomalías magnéticas:
- Las anomalías magnéticas son variaciones del campo magnético terrestre provocadas por la corteza oceánica magnetizada.
- A medida que el fondo marino se expande y se aleja de la cresta, estas anomalías magnéticas forman patrones simétricos a ambos lados del eje de la cresta.
- Al estudiar los patrones de anomalías magnéticas en el fondo marino, los científicos pueden determinar la edad y la tasa de expansión de la corteza oceánica.
Evidencia de respaldo:
- La edad del fondo marino aumenta sistemáticamente con la distancia desde la dorsal oceánica, lo que proporciona una correlación directa entre la edad del fondo marino y su expansión.
- Las secuencias coincidentes de anomalías magnéticas en el fondo marino a ambos lados de las dorsales en medio del océano apoyan la idea de una expansión del fondo marino y una formación simétrica de la corteza.
- La edad del fondo marino y las tasas de expansión derivadas de anomalías magnéticas se alinean con otras observaciones geológicas y geofísicas, como las mediciones del flujo de calor y los modelos de placas tectónicas.
En resumen, la edad del fondo marino y las pistas magnéticas, como las inversiones magnéticas y las anomalías magnéticas, proporcionan evidencia convincente que respalda la teoría de la expansión del fondo marino, que es fundamental para comprender la tectónica de placas y la naturaleza dinámica de la corteza terrestre.