Los cinturones de pliegue y empuje se forman cuando grandes secciones de la corteza terrestre se acortan y engrosan por compresión horizontal. Esta compresión hace que las rocas de la corteza se doblen y rompan, y las fallas de empuje resultantes pueden crear cadenas montañosas.
Los Himalayas son un ejemplo clásico de cinturón de pliegue y empuje. Se formaron por la colisión de la Placa India con la Placa Euroasiática, y la compresión resultante ha creado algunas de las montañas más altas del mundo. Otros ejemplos de cinturones plegados y corridos incluyen los Alpes en Europa, los Apalaches en América del Norte y los Andes en América del Sur.
Los cinturones plegados y corridos son características geológicas importantes porque pueden proporcionar información sobre la historia de una región y las fuerzas que la han moldeado. También pueden ser importantes recursos económicos, ya que a menudo contienen minerales valiosos y reservas de petróleo y gas.