El estudio, publicado esta semana en Nature, arroja nueva luz sobre lo que sucede cuando un volcán en un punto caliente entra en erupción. Los volcanes de puntos calientes se forman cuando el magma del manto de la Tierra sube a la superficie y entra en erupción, formando una montaña en forma de cono.
El vulcanismo explosivo en los puntos críticos se caracteriza por erupciones violentas que producen grandes cantidades de ceniza y piedra pómez. Estas erupciones pueden tener un impacto devastador en las poblaciones humanas y causar daños ambientales generalizados.
Uno de los ejemplos más famosos de un volcán explosivo es el Parque Nacional de Yellowstone, que se encuentra en la cima de un volcán inactivo. Los científicos han estado preocupados durante mucho tiempo de que Yellowstone pudiera volver a entrar en erupción, causando potencialmente daños catastróficos a los Estados Unidos.
El nuevo estudio, sin embargo, sugiere que el vulcanismo en puntos críticos explosivos es menos común de lo que se pensaba anteriormente. Los investigadores analizaron datos de varios volcanes en todo el mundo y descubrieron que las erupciones explosivas son relativamente raras.
Además, el estudio propone una teoría para explicar por qué el vulcanismo explosivo en puntos críticos es tan raro. Los investigadores sugieren que el factor clave es la velocidad a la que el magma asciende desde el manto. Si el magma asciende lentamente, tiene tiempo de enfriarse y volverse viscoso. Esto hace que sea menos probable que estalle violentamente.
Sin embargo, si el magma asciende rápidamente, no tiene tiempo de enfriarse y volverse viscoso. Esto hace que sea más probable que entre en erupción violentamente, produciendo erupciones explosivas.
Por lo tanto, el estudio sugiere que el riesgo de vulcanismo explosivo en puntos críticos es mayor en áreas donde el magma aumenta rápidamente. Esta información podría usarse para ayudar a identificar áreas que tienen un alto riesgo de vulcanismo explosivo y desarrollar planes para mitigar el daño potencial.