* Transformación química: El carbón ardiente implica una reacción química donde el carbono en el carbón reacciona con oxígeno en el aire, produciendo dióxido de carbono, agua y otros subproductos. Este es un cambio químico que altera la composición del carbón.
* Lanzamiento de energía: La reacción libera una cantidad significativa de energía en forma de calor y luz. Esta energía no se puede capturar y utilizar fácilmente para revertir el proceso.
* Aumento de la entropía: La quema de carbón aumenta el trastorno general (entropía) del sistema. La estructura altamente organizada del carbón se divide en productos menos ordenados. Este aumento en la entropía hace que la reversión del proceso sea extremadamente difícil.
En resumen: Si bien es posible capturar algunos de los subproductos del carbón en quema, no es posible revertir completamente el proceso y recrear el carbón original.