He aquí por qué:
* cobre es un excelente conductor de electricidad y es relativamente económico. También es muy duradero y resistente a la corrosión. Esto lo convierte en el material más común para el cableado eléctrico en hogares, empresas y aplicaciones industriales.
* Aluminio es otro buen conductor de electricidad, y es más ligero y más barato que el cobre. Sin embargo, es menos duradero y más propenso a la corrosión, por lo que a menudo se usa en aplicaciones donde el peso y el costo son factores importantes, como las líneas eléctricas.
Si bien el cobre y el aluminio son los más comunes, algunos otros materiales utilizados para los cables incluyen:
* Silver: Ofrece una conductividad aún mejor que el cobre, pero es mucho más caro. Se utiliza en aplicaciones especializadas donde la conductividad máxima es crítica.
* oro: Altamente resistente a la corrosión y la oxidación, lo que lo hace adecuado para audio de alta gama y electrónica.
* níquel: A menudo se usa en aplicaciones de alta temperatura.
* acero: Fuerte y duradero, lo que lo hace adecuado para cables estructurales y cables de conexión a tierra.
La elección del material depende de la aplicación específica y de las propiedades deseadas.