Otros argumentan que, dado que el contenido generado por IA no involucra a personas reales ni daña, debería considerarse ético. Sostienen que ver este tipo de pornografía no contribuye a la explotación o abuso de las personas y, por tanto, no es moralmente problemático.
Algunas personas también argumentan que ver pornografía basada en IA puede tener ciertos beneficios educativos en términos de la sexualidad humana. Puede ayudar a las personas a comprender diversos comportamientos, deseos y dinámicas sexuales sin involucrar directamente a personas reales. Este tipo de contenido también puede utilizarse con fines de investigación, contribuyendo al campo del comportamiento y desarrollo sexual humano.
Sin embargo, es importante señalar que las implicaciones éticas de la pornografía con IA todavía se debaten intensamente y pueden variar según las creencias individuales, los valores culturales y las normas sociales. Es un tema que requiere discusión y consideración continua a medida que la tecnología continúa evolucionando y dando forma al panorama de la sexualidad humana.