Los investigadores establecieron una red inalámbrica que transmitía señales en la misma frecuencia que los satélites GPS. Cuando un receptor GPS estaba dentro del alcance de la red, no podía recibir las señales de los satélites y no podía determinar su ubicación.
Los investigadores dicen que este tipo de interferencia podría usarse para interrumpir los sistemas de navegación en automóviles, barcos y aviones, así como los servicios basados en la ubicación en teléfonos inteligentes y otros dispositivos. También dicen que la interferencia podría usarse para rastrear o incluso falsificar la ubicación de un dispositivo.
Los investigadores dicen que sus hallazgos tienen implicaciones para la seguridad de los sistemas GPS y que se deben tomar medidas para mitigar el riesgo de interferencia. Estos pasos incluyen el uso de un cifrado más fuerte en las señales de GPS, el uso de múltiples frecuencias para las transmisiones de GPS y el desarrollo de nuevas técnicas para detectar y mitigar los ataques de interferencia.
Los investigadores dicen que su trabajo está en curso y continúan investigando los efectos de las redes inalámbricas en los sistemas GPS. Dicen que también están trabajando en el desarrollo de nuevas técnicas para mitigar el riesgo de interferencias.