Estados Unidos y China han estado inmersos en una guerra comercial desde 2018, cuando la administración Trump impuso aranceles a los productos chinos. Los aranceles estaban destinados a reducir el déficit comercial entre los dos países y proteger los empleos estadounidenses. China tomó represalias con sus propios aranceles sobre los productos estadounidenses. La guerra comercial ha perturbado las cadenas de suministro y ha elevado los precios para los consumidores en ambos países.
Transferencia de Tecnología
Estados Unidos y China también compiten por el dominio en el campo de la alta tecnología. China ha estado invirtiendo mucho en investigación y desarrollo y ahora es un actor importante en muchas industrias de alta tecnología, como la inteligencia artificial, la computación cuántica y la tecnología inalámbrica 5G. A Estados Unidos le preocupa que el avance tecnológico de China amenace sus propios intereses económicos y militares.
Espionaje industrial
Estados Unidos y China también se han acusado mutuamente de espionaje industrial. Estados Unidos ha acusado a China de robar secretos comerciales de empresas estadounidenses, mientras que China ha acusado a Estados Unidos de espiar a sus empresas de tecnología. Las acusaciones han tensado aún más las relaciones entre los dos países.
Influencia regional
Estados Unidos y China también compiten por la influencia en la región de Asia y el Pacífico. China está ampliando su presencia militar en la región y también está construyendo nuevas asociaciones comerciales con países de la región. A Estados Unidos le preocupa que la creciente influencia de China amenace sus propios intereses en la región.
Derechos Humanos
Estados Unidos y China también se han enfrentado por cuestiones de derechos humanos. Estados Unidos ha criticado el trato que China da a su minoría musulmana, su represión de la disidencia y su falta de libertad de prensa. China ha rechazado las críticas, diciendo que se trata de un asunto interno.
Estados Unidos y China son los dos países más poderosos del mundo y su rivalidad está teniendo un impacto importante en el orden global. Los dos países compiten por el dominio económico, tecnológico y militar, y el resultado de su competencia moldeará el futuro del mundo.