Un detector de mentiras, también llamado polígrafo, es un dispositivo que mide y registra varios indicadores fisiológicos como la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la respiración y la conductividad de la piel mientras a una persona se le hacen una serie de preguntas. Se supone que ciertas respuestas fisiológicas están asociadas con la mentira o el engaño, y el polígrafo puede detectar estos cambios.
Las respuestas fisiológicas medidas por un polígrafo son:
1. Presión arterial: La presión arterial aumenta cuando una persona está bajo estrés, lo que puede deberse a mentir o estar nervioso por la prueba.
2. Frecuencia cardíaca: La frecuencia cardíaca también aumenta cuando una persona está bajo estrés.
3. Respiración: Los patrones de respiración pueden cambiar cuando una persona está acostada, como volverse superficial o irregular.
4. Conductividad de la piel: La conductividad de la piel mide la conductancia eléctrica de la piel, que se ve afectada por la producción de sudor. El aumento de la sudoración puede indicar estrés o ansiedad.
Durante un examen de polígrafo, al individuo se le hacen una serie de preguntas, algunas de las cuales se conocen como preguntas de control y otras son relevantes para el asunto que se investiga. Las preguntas de control están diseñadas para provocar una fuerte respuesta emocional, como culpa o miedo a ser descubierto en una mentira, mientras que las preguntas relevantes están diseñadas para provocar una respuesta específicamente relacionada con el tema en cuestión. El examinador compara las respuestas fisiológicas con las preguntas de control y relevantes para identificar posibles engaños.
Es importante señalar que los polígrafos no son infalibles y se ha debatido su precisión. Si bien pueden proporcionar cierta información, no siempre son confiables para determinar si alguien miente o dice la verdad. Otros factores, como las contramedidas psicológicas, el nerviosismo y las condiciones físicas, pueden influir en los resultados de un examen poligráfico.
Los exámenes poligráficos a veces se utilizan en investigaciones criminales, exámenes previos al empleo y otros contextos relacionados con la seguridad, pero su uso ha sido controvertido debido a preocupaciones sobre su confiabilidad y la posibilidad de falsos positivos o falsos negativos. En muchas jurisdicciones, los resultados del polígrafo no son admisibles como prueba ante un tribunal.