He aquí por qué:
* unión metálica: El zinc, como la mayoría de los metales, tiene una estructura donde los electrones están unidos libremente a los átomos. Esto permite que estos electrones se muevan libremente a lo largo del material, lo que lo convierte en un buen conductor tanto de calor como de electricidad.
* Conductividad térmica: El zinc tiene una conductividad térmica relativamente alta, lo que significa que transfiere el calor de manera eficiente. Esto lo hace útil en aplicaciones como disipadores de calor y radiadores.
* Conductividad eléctrica: El zinc también tiene una buena conductividad eléctrica, lo que lo hace adecuado para su uso en baterías, cableado eléctrico y otros componentes eléctricos.
Sin embargo, la conductividad del zinc no es tan alta como algunos otros metales como el cobre o la plata.