1. un metal: Cuando el hidrógeno pierde su único electrón, se convierte en un ion cargado positivamente (H+), formando un catión. Este comportamiento es característico de los metales, y es por eso que el hidrógeno se coloca en el grupo 1 de la tabla periódica, junto con los metales alcalinos.
2. un no metal: Cuando el hidrógeno gana un electrón, se convierte en un ion cargado negativamente (H-), formando un anión. Este comportamiento es característico de los no metales, y es por eso que el hidrógeno también se puede colocar en el grupo 17 de la tabla periódica, junto con los halógenos.
Por lo tanto, el hidrógeno puede exhibir propiedades metálicas y no metálicas, lo que lo convierte en un elemento único.