en biología:
* agua: Los enlaces de hidrógeno son la fuerza primaria que mantiene juntas las moléculas de agua. Son responsables del alto punto de ebullición del agua, la tensión superficial y la capacidad de disolver muchas moléculas polares.
* proteínas: Los enlaces de hidrógeno ayudan a estabilizar las estructuras secundarias, terciarias y cuaternarias de las proteínas. Se forman entre los residuos de aminoácidos dentro de una cadena de polipéptidos y entre diferentes cadenas de polipéptidos.
* ADN y ARN: Los enlaces de hidrógeno mantienen unidos los dos hilos de ADN, formando la doble hélice. También ayudan a estabilizar la estructura del ARN.
* celulosa: Las cadenas lineales de las moléculas de glucosa en la celulosa se mantienen juntas mediante enlaces de hidrógeno, dándole su estructura rígida.
* Enzimas: Los enlaces de hidrógeno ayudan a formar el sitio activo de las enzimas y se unen a sustratos a la enzima.
en química:
* Ice: Los enlaces de hidrógeno entre las moléculas de agua en hielo son más fuertes que en el agua líquida, lo que hace que las moléculas formen una estructura cristalina más ordenada.
* Cristales líquidos: Algunos cristales líquidos forman sus estructuras ordenadas debido a la unión de hidrógeno.
Ejemplos generales:
* carbohidratos: Los enlaces de hidrógeno contribuyen a la estructura y las propiedades de los carbohidratos, como el almidón y el glucógeno.
* polímeros: Los enlaces de hidrógeno pueden ocurrir entre las cadenas de polímeros, influyendo en sus propiedades como la resistencia y la flexibilidad.
Es importante tener en cuenta que los enlaces de hidrógeno no son tan fuertes como los enlaces covalentes, pero su efecto colectivo puede ser significativo para determinar la estructura y las propiedades de muchas moléculas y materiales.