* Fuerzas intermoleculares: Las moléculas líquidas se mantienen juntas por atracciones como enlaces de hidrógeno, interacciones dipolo-dipolo y fuerzas de dispersión de Londres. Estas fuerzas mantienen las moléculas juntas.
* Entrada de energía: Para la transición de un líquido a un gas, las moléculas deben superar estas fuerzas atractivas y separarse más. Esto requiere una entrada de energía.
* Energía térmica: La energía requerida para romper estos enlaces generalmente se suministra como calor. A medida que el líquido absorbe el calor, las moléculas ganan energía cinética, lo que hace que vibren y se muevan más rápido.
* Cambio de fase: Cuando se absorbe suficiente energía, las moléculas superan las fuerzas intermoleculares, se liberan del líquido y ingresan al estado gaseoso. Este cambio de fase se llama vaporización.
Piense en ello así: Imagina que tienes un montón de imanes pegados. Para separarlos, debe aplicar energía. Cuanta más energía aplique, más separan los imanes se moverán. En el caso de líquidos y gases, el calor proporciona la energía para separar las moléculas.
El aumento de la temperatura es un reflejo del aumento de la energía cinética de las moléculas a medida que pasan del líquido al estado gaseoso.