1. Lograr la estabilidad:
* Los átomos se esfuerzan por lograr una configuración de electrones estable, que generalmente se asemeja a un gas noble con una carcasa externa completa de electrones.
* Los átomos con pocos electrones de valencia (por ejemplo, metales álcali con 1 electrón de valencia) son altamente reactivos porque tienden a perder estos electrones para lograr un octeto estable.
* Los átomos con cáscaras de valencia casi llenas (por ejemplo, halógenos con 7 electrones de valencia) también son reactivos, ya que obtienen fácilmente un electrón para completar su octeto.
2. Formación de enlaces:
* enlaces iónicos: Los átomos con una gran diferencia en la electronegatividad (tendencia a atraer electrones) formarán enlaces iónicos. Esto generalmente ocurre cuando un átomo tiene algunos electrones de valencia y los pierde fácilmente, mientras que el otro átomo tiene casi una cubierta de valencia completa y obtiene fácilmente un electrón.
* enlaces covalentes: Los átomos con electronegatividad similar compartirán electrones para lograr una configuración estable. El número de electrones de valencia determina los tipos de enlaces covalentes formados (único, doble, triple).
3. Tendencias de reactividad:
* En un período: A medida que avanza en un período de izquierda a derecha, aumenta el número de electrones de valencia, lo que lleva a una disminución del carácter metálico y un aumento en el carácter no metálico. Esto generalmente da como resultado una mayor reactividad.
* Down un grupo: En un grupo, los electrones de valencia están más lejos del núcleo, lo que los hace más fáciles de perder. Esto generalmente conduce a un mayor carácter metálico y reactividad.
Ejemplos:
* sodio (na): Tiene 1 electrón de valencia, altamente reactivo, lo pierde fácilmente para formar iones Na+.
* cloro (cl): Tiene 7 electrones de valencia, altamente reactivos, gana fácilmente 1 electrón para formar clandion.
* carbono (c): Tiene 4 electrones de valencia, forma enlaces covalentes compartiendo electrones, lo que resulta en una amplia gama de compuestos orgánicos.
En resumen: El número de electrones de valencia determina el deseo de un átomo de ganar, perder o compartir electrones para lograr la estabilidad. Esto influye directamente en su reactividad y los tipos de enlaces químicos que forma.