Aquí hay algunos ejemplos:
* Para limpiadores líquidos: 1 onza de limpiador a 1 galón de agua de EE. UU.
* Para limpiadores en polvo: 1 cucharada de limpiador a 1 galón de agua de EE. UU.
* Para limpiadores concentrados: Las instrucciones especificarán la relación de dilución (por ejemplo, 1:10, lo que significa 1 parte del limpiador a 10 partes de agua).
Siempre siga las instrucciones específicas en la etiqueta del limpiador. Esto asegurará que obtenga la dilución correcta y que no use demasiado o muy poco más limpio.