He aquí por qué:
* polaridad: El agua es un solvente altamente polar. Disuelve sustancias que también son polares, como sales y azúcares. Los colorantes con grupos polares (como grupos de ácido sulfónico) se disolverán bien en el agua.
* solubilidad: Los colorantes con estructuras no polares, como las cadenas de hidrocarburos hidrofóbicos, no se disolverán fácilmente en agua. Estos colorantes requieren solventes no polares, como solventes orgánicos (por ejemplo, etanol, acetona, tolueno).
* Interacciones químicas: Algunos tintes pueden reaccionar con el agua, lo que hace que se descompongan o cambien de color.
Ejemplos:
* tintes solubles en agua: Tintes ácidos, colorantes directos, tintes básicos, colorantes reactivos.
* tintes insolubles de agua: Dispersos tintes, tintes de tina, tintes de pigmento.
Por lo tanto, la elección del solvente depende en gran medida de la estructura química y las propiedades del tinte específico.