Si bien hay otros factores que contribuyen a la resistencia de un material a la penetración, como la dureza (Capacidad para absorber energía antes de fracturarse), Ductilidad (Capacidad para deformarse sin romperse), y resistencia a la tracción (Resistencia a las fuerzas de tracción), la dureza es la más directa relacionada con la resistencia a la penetración.
Aquí hay un desglose:
* Dureza es la resistencia de un material a la deformación localizada. Se mide cuánta fuerza se requiere para sangrar la superficie con un objeto estándar.
* Hardedad mide la capacidad de un material para absorber energía antes de fracturarse. Un material resistente puede resistir la penetración, pero también puede doblarse o deformarse.
* Ductilidad describe la capacidad de un material para deformarse bajo estrés por tracción. Un material dúctil se puede estirar en un cable sin romperse.
* resistencia a la tracción es el estrés máximo que un material puede soportar antes de romperse. No está directamente relacionado con la resistencia a la penetración, pero es importante para la fuerza general.
Entonces, mientras que otras propiedades juegan un papel, Dureza es la propiedad más fundamental que contribuye directamente a la capacidad de un metal para resistir la penetración.