1. Reacciones ácido-base :Muchos limpiadores domésticos contienen ácidos o bases como ingredientes activos. Cuando estos limpiadores entran en contacto con superficies o suciedad, pueden sufrir reacciones ácido-base. Por ejemplo, cuando un limpiador básico (por ejemplo, bicarbonato de sodio) se mezcla con una sustancia ácida (por ejemplo, vinagre), reaccionan para formar una sal (acetato de sodio) y agua, además de liberar dióxido de carbono.
2. Hidrólisis :La hidrólisis es una reacción química en la que las moléculas de agua descomponen un compuesto. Algunos limpiadores domésticos contienen sustancias que sufren hidrólisis cuando se mezclan con agua. Por ejemplo, las moléculas de jabón (p. ej., laurilsulfato de sodio) se hidrólisis, formando sales de ácidos grasos (jabones) y glicerol. La hidrólisis ayuda a emulsionar la suciedad y la mugre, lo que permite que se eliminen más fácilmente.
3. Oxidación :Las reacciones de oxidación implican la transferencia de electrones de una sustancia a otra. Ciertos limpiadores domésticos contienen agentes oxidantes, como lejía (hipoclorito de sodio). El blanqueador reacciona con la suciedad, las manchas y los microorganismos, provocando que se vuelvan incoloros o se descompongan. La oxidación también puede ayudar a desinfectar las superficies al matar bacterias y virus.
4. Reducción :Las reacciones de reducción implican la ganancia de electrones por parte de una sustancia. Algunos agentes de limpieza, como los abrillantadores de metales, pueden contener agentes reductores. Estos agentes pueden donar electrones a las superficies metálicas, eliminando el deslustre y restaurando el brillo del metal.
5. Acción tensioactiva :Los tensioactivos o agentes tensioactivos se encuentran comúnmente en los limpiadores domésticos. Actúan reduciendo la tensión superficial del agua, permitiéndole extenderse y penetrar mejor. Los tensioactivos ayudan a emulsionar la suciedad y la grasa, lo que facilita su eliminación.
6. Emulsificación :La emulsificación es el proceso de dispersar un líquido (aceite o grasa) en otro líquido (agua) con la ayuda de un emulsionante. Los emulsionantes, a menudo presentes en los limpiadores domésticos, ayudan a crear una mezcla estable de líquidos inmiscibles (por ejemplo, aceite y agua). Esto permite eliminar manchas de grasa y suciedad suspensándolas en agua.
7. Saponificación :La saponificación es un tipo específico de reacción de hidrólisis que implica la conversión de grasas o aceites en jabón. Este proceso ocurre cuando las grasas o los aceites reaccionan con una base fuerte (por ejemplo, lejía). Las moléculas de jabón tienen un extremo hidrófilo (que ama el agua) y un extremo hidrófobo (que odia el agua), lo que les permite disolver la suciedad y la mugre tanto a base de agua como de aceite.
Recuerde, siga siempre las instrucciones y precauciones de seguridad que figuran en las etiquetas de los limpiadores domésticos para garantizar un uso adecuado y seguro.