El número atómico de un elemento es igual al número de protones en el núcleo de un átomo de ese elemento. Por ejemplo, el número atómico del hidrógeno es 1, lo que significa que un átomo de hidrógeno tiene un protón en su núcleo. El número atómico del helio es 2, lo que significa que un átomo de helio tiene dos protones en su núcleo, y así sucesivamente.