En el caso del argón, su capa electrónica más externa contiene 8 electrones, que es el número máximo de electrones que esta capa puede contener. Esta capa electrónica completa le da al argón una configuración muy estable, lo que significa que es poco probable que forme enlaces químicos con otros elementos. Como resultado, el argón se encuentra como un gas monoatómico, lo que significa que existe como átomos individuales en lugar de moléculas.
Los otros gases nobles, helio, neón, criptón, xenón y radón, también son gases monoatómicos por la misma razón. Todos ellos tienen capas electrónicas más externas completas, lo que los hace muy estables y es poco probable que formen enlaces químicos.