Cuando el NaCl se disuelve en agua, se disocia en iones Na+ y Cl-. Estos iones interactúan con las moléculas de agua a través de interacciones ion-dipolo. Los iones de sodio positivos atraen los átomos de oxígeno parcialmente negativos del agua, mientras que los iones de cloruro negativos atraen los átomos de hidrógeno del agua parcialmente positivos. Este tipo de interacción es relativamente fuerte y contribuye significativamente a la solubilidad del NaCl en agua.
2. Enlace de hidrógeno:
Las propias moléculas de agua son capaces de formar enlaces de hidrógeno entre sí. Los enlaces de hidrógeno implican la formación de un enlace entre un átomo de hidrógeno (de una molécula de agua) y un átomo fuertemente electronegativo (como el oxígeno o el nitrógeno). En el caso del NaCl en agua, las moléculas de agua pueden formar enlaces de hidrógeno con el átomo de oxígeno del ion cloruro. Este tipo de interacción es más débil que las interacciones ion-dipolo pero aún contribuye a la estabilidad de la solución.
3. Interacciones de Van der Waals:
Las interacciones de Van der Waals son fuerzas intermoleculares débiles que existen entre todas las moléculas e incluyen fuerzas de dispersión de London, interacciones dipolo-dipolo e interacciones dipolo-dipolo inducidas. En el caso del NaCl en agua, se producen interacciones de Van der Waals entre las moléculas de agua y los iones de sodio y cloruro. Estas interacciones son las más débiles de las tres fuerzas intermoleculares mencionadas aquí, pero aún contribuyen a la estabilidad general de la solución.