En el KCl sólido, los iones se mantienen unidos mediante fuertes fuerzas electrostáticas. Estas fuerzas impiden que los iones se muevan, por lo que el compuesto no puede conducir electricidad. Cuando el KCl se disuelve en agua, las moléculas de agua rodean los iones y rompen las fuerzas electrostáticas. Esto permite que los iones se muevan libremente y el compuesto se convierte en un buen conductor de electricidad.
Lo mismo sucede cuando se funde KCl. El calor del proceso de fusión rompe las fuerzas electrostáticas entre los iones, permitiéndoles moverse libremente y conducir electricidad.
La diferencia de conductividad entre el KCl sólido y fundido se debe a la diferencia en la movilidad de los iones. En estado sólido, los iones son inmóviles y no pueden conducir electricidad. En estado fundido, los iones son móviles y pueden conducir electricidad.