Los átomos que normalmente forman enlaces iónicos incluyen:
1. Metales alcalinos (Grupo 1):estos elementos tienen una electronegatividad baja y pierden fácilmente su electrón más externo para formar iones positivos (cationes). Los ejemplos incluyen litio (Li), sodio (Na) y potasio (K).
2. Metales alcalinotérreos (Grupo 2):Al igual que los metales alcalinos, los metales alcalinotérreos tienen una electronegatividad baja y pierden fácilmente sus dos electrones más externos para formar iones positivos. Los ejemplos incluyen calcio (Ca), magnesio (Mg) y estroncio (Sr).
3. Halógenos (Grupo 17):Los halógenos tienen una alta electronegatividad y atraen fuertemente los electrones de otros átomos. Gana fácilmente un electrón para lograr una configuración electrónica estable y formar iones negativos (aniones). Los ejemplos incluyen flúor (F), cloro (Cl) y bromo (Br).
4. Oxígeno y Azufre (Grupo 16):El oxígeno y el azufre tienen una alta electronegatividad y pueden formar iones negativos al ganar electrones de elementos más electropositivos. A menudo forman enlaces iónicos con metales.
En general, los enlaces iónicos se producen cuando existe una gran diferencia de electronegatividad entre un metal y un no metal. El metal pierde electrones frente al no metal, lo que resulta en la formación de iones metálicos cargados positivamente e iones no metálicos cargados negativamente. Estos iones con cargas opuestas se mantienen unidos mediante fuerzas electrostáticas para formar un compuesto iónico.