1. Daño a las cutículas :La cutícula es la capa más externa del tallo del cabello y actúa como una barrera protectora. Un ambiente de pH alto (alcalino), como el de algunos champús o productos de peinado fuertes, puede hacer que la cutícula se hinche y se levante, haciendo que el cabello sea más susceptible al daño, el encrespamiento y la rotura.
2. Desvanecimiento del color :El color del cabello, ya sea natural o teñido, puede verse afectado por el pH. Los productos altamente alcalinos pueden eliminar los aceites y pigmentos naturales del cabello, lo que provoca que el color se desvanezca y se vuelva opaco. Es especialmente importante tener esto en cuenta en el cabello teñido, ya que los productos alcalinos pueden acelerar la pérdida del color.
3. Desnaturalización de proteínas :El cabello está compuesto principalmente por la proteína queratina, que le da fuerza y elasticidad. La exposición prolongada a niveles altos de pH puede provocar la desnaturalización de las proteínas, donde se altera la estructura de la queratina, lo que da como resultado un cabello debilitado y propenso a romperse y tener puntas abiertas.
4. Irritación del cuero cabelludo :Un pH alto puede alterar el equilibrio natural del pH del cuero cabelludo, que es ligeramente ácido. Esto puede provocar irritación, picazón y sequedad del cuero cabelludo. Algunas personas también pueden experimentar una mayor producción de grasa a medida que el cuero cabelludo intenta compensar el desequilibrio del pH.
5. Frizz y estática :Los productos con pH alto pueden hacer que el cabello pierda humedad, lo que provoca un aumento del encrespamiento y la estática. Esto se debe a que la cutícula, que normalmente ayuda a suavizar el tallo del cabello, se vuelve áspera y permite que escape más humedad.
6. Sequedad y fragilidad :El uso prolongado de productos con pH alto puede despojar al cabello de sus aceites naturales, dejándolo seco y quebradizo. Esto puede hacer que el cabello sea más propenso a enredarse y romperse, especialmente cuando está mojado.
Por otro lado, utilizar productos con un pH más cercano al del cabello y el cuero cabelludo (4,5-5,5) puede ayudar a mantener el equilibrio natural del cabello, preservar la humedad y minimizar el daño. Es importante elegir productos para el cuidado del cabello que tengan un pH equilibrado y estén formulados para ser suaves con el cabello y el cuero cabelludo. Consultar con un estilista o dermatólogo profesional puede brindarle orientación personalizada según su tipo de cabello y sus necesidades específicas.