El cambio de color suele deberse a la presencia de un indicador , que es un compuesto químico que sufre un cambio notable de color dependiendo del pH de la solución. El cambio de color del indicador se basa en su estructura química y la forma en que interactúa con los iones de hidrógeno (H+) en la solución.
Cuando el ácido y la base se mezclan durante la titulación, el pH de la solución cambia. A medida que se agrega el ácido, el pH disminuye debido a un aumento de iones H+. Cuando el pH alcanza el pH de punto final específico del indicador , el indicador sufre un cambio de color, lo que indica la finalización de la titulación.
La selección del indicador apropiado es crucial para determinar con precisión el criterio de valoración. Diferentes indicadores tienen diferentes rangos de pH de punto final y cambios de color. El indicador debe tener un pH final cercano al punto de equivalencia de la reacción ácido-base para obtener los resultados más precisos.
Por ejemplo, en una valoración ácido-base típica que utiliza fenolftaleína como indicador, el color inicial de la solución es incoloro. A medida que se agrega la base, el pH aumenta y la solución se vuelve rosada gradualmente. Cuando el pH alcanza el punto final, que es alrededor de pH 8,3, la solución sufre un cambio de color rápido y dramático de incolora a rosa. Esto indica que la titulación está completa y que los moles de ácido agregados son equivalentes a los moles de base presentes en la solución.
El cambio de color en la valoración ácido-base proporciona una señal visual de que se ha alcanzado el punto final, lo que permite la determinación precisa de la concentración del ácido o base desconocido en la solución que se está valorando.