No, generalmente ya no se recomienda el uso de formaldehído como desinfectante. Si bien es eficaz para matar una amplia gama de microorganismos, incluidas bacterias, hongos y virus, es una sustancia tóxica y puede causar una variedad de efectos adversos para la salud, como cáncer, problemas respiratorios, irritación de la piel e irritación de los ojos. El formaldehído ha sido clasificado como carcinógeno por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) y su exposición está estrictamente regulada en muchos países.
Debido a estos riesgos, el formaldehído está siendo reemplazado por desinfectantes más seguros y menos tóxicos, como compuestos de amonio cuaternario, peróxido de hidrógeno e hipoclorito de sodio (lejía). Estas alternativas son generalmente menos peligrosas y más respetuosas con el medio ambiente, aunque siguen siendo eficaces para desinfectar superficies y eliminar microorganismos nocivos.