La crisis de ebullición es una condición peligrosa porque puede provocar sobrecalentamiento y daños a la superficie calentada. Por tanto, es importante comprender los factores que pueden provocar la crisis en ebullición y tomar medidas para evitarla.
Los siguientes son algunos de los factores que pueden contribuir a la crisis en ebullición:
* Alto flujo de calor: Cuanto mayor sea el flujo de calor, más probable será que se produzca la crisis de ebullición.
* Bajo caudal de refrigerante: Un caudal de refrigerante bajo puede provocar una acumulación de burbujas de vapor en la superficie calentada, lo que puede aumentar el riesgo de crisis de ebullición.
* Alta presión: La alta presión también puede aumentar el riesgo de crisis de ebullición, ya que puede hacer que las burbujas se formen más rápidamente y se hagan más grandes.
* Rugosidad superficial: Una superficie rugosa puede proporcionar sitios de nucleación para que se formen burbujas, lo que puede aumentar el riesgo de crisis de ebullición.
* Propiedades del fluido: Las propiedades del líquido refrigerante, como su densidad, viscosidad y tensión superficial, también pueden afectar el riesgo de crisis de ebullición.
Hay una serie de cosas que se pueden hacer para evitar la crisis en ebullición, entre ellas:
* Reducción del flujo de calor: El flujo de calor se puede reducir aumentando el área de la superficie calentada o utilizando una fuente de calor de menor potencia.
* Aumento del caudal de refrigerante: El caudal de refrigerante se puede aumentar utilizando una bomba más grande o aumentando la caída de presión a través de la superficie calentada.
* Reducir la presión: La presión se puede reducir utilizando un sistema de menor presión o ventilando el sistema a una presión más baja.
* Mejora de la rugosidad de la superficie: La rugosidad de la superficie se puede mejorar puliendo o recubriendo la superficie.
* Selección de las propiedades del fluido adecuadas: Las propiedades del fluido se pueden seleccionar para minimizar el riesgo de crisis de ebullición.
Al comprender los factores que pueden causar la crisis de ebullición y tomar medidas para evitarla, es posible garantizar el funcionamiento seguro de los sistemas de transferencia de calor por ebullición.