Una de las cosas más importantes que puede hacer para ayudar a combatir la resistencia a los antibióticos es practicar una buena higiene de manos. Esto significa lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, especialmente después de toser o estornudar, después de ir al baño, antes de comer y después de tocar superficies en lugares públicos.
Los desinfectantes para manos a base de alcohol también pueden ser eficaces para matar gérmenes, pero no deben usarse como sustitutos del agua y el jabón.
Al practicar una buena higiene de manos, puede ayudar a reducir la propagación de bacterias y otros microorganismos, y ayudar a mantenerse sanos usted y sus seres queridos.
Además de practicar una buena higiene de manos, hay algunas otras cosas que puedes hacer para ayudar a combatir la resistencia a los antibióticos:
- Tome antibióticos sólo cuando se los recete un médico.
- Siga cuidadosamente las instrucciones de su receta y tome el tratamiento completo, incluso si se siente mejor.
- Nunca compartas antibióticos con otras personas.
- Anime a su médico a utilizar antibióticos de espectro reducido siempre que sea posible.
- Vacúnese para protegerse de infecciones que pueden tratarse con antibióticos.
- Quédese en casa y no vaya al trabajo o a la escuela cuando esté enfermo para evitar transmitir infecciones a otras personas.
La resistencia a los antibióticos es un problema grave, pero todos podemos ayudar a combatirlo. Si sigue estos sencillos consejos, usted puede hacer su parte para mantener la eficacia de los antibióticos para las generaciones venideras.