Malas prácticas agrícolas :Muchos agricultores de las Grandes Llanuras adoptaron prácticas agrícolas insostenibles que dejaron el suelo vulnerable a la erosión. Estas prácticas incluían la labranza excesiva de la tierra, que destruía la vegetación natural que mantenía el suelo en su lugar, y los monocultivos, que implicaban plantar el mismo cultivo año tras año sin rotar diferentes tipos de cultivos.
Pastoreo excesivo :El pastoreo extensivo de ganado, especialmente de ovejas, contribuyó a la degradación de los pastizales de las Grandes Llanuras. El pastoreo excesivo eliminó la capa protectora de vegetación que mantenía unido el suelo, haciéndolo más susceptible a la erosión.
Vientos fuertes :La sequía y las malas prácticas agrícolas crearon las condiciones ideales para que los fuertes vientos levantaran y arrastraran la capa superior del suelo seca y suelta. Estos vientos, conocidos como "ventiscas negras", transportaron grandes cantidades de polvo a largas distancias, creando enormes tormentas de polvo que oscurecieron los cielos y causaron grandes daños.
La combinación de estos factores, incluidas sequías severas, malas prácticas agrícolas, pastoreo excesivo y fuertes vientos, provocaron el devastador Dust Bowl que afectó a millones de personas y causó importantes daños económicos y ambientales en la región de las Grandes Llanuras de los Estados Unidos.