Uno de los efectos secundarios más devastadores de la contaminación es el aumento de la acidez en la lluvia y el agua subterránea. Esto afecta a animales y plantas, y tiene implicaciones a largo plazo para nuestro medio ambiente.
La escala de pH
La escala de pH mide la acidez o alcalinidad de un líquido, de 0 a 14-7 es neutro, cualquier cosa debajo de 7 es ácida y cualquier otra más alta es alcalina.
Agua natural
La lluvia y el agua subterránea tienden a ser naturalmente ligeramente ácidas, usualmente no más bajas que 6 en la escala de pH. La mayoría de las plantas y animales toleran este nivel de acidez sin ningún problema.
Contaminación
Los subproductos de la contaminación del aire y del agua son ácidos. Si bien las sustancias alcalinas naturales en el suelo pueden reducir su impacto, el resultado de dicha contaminación suele ser un entorno mucho más ácido que el normal.
Lluvia ácida
Cuando el agua de bajo pH se propaga a través de la precipitación, se llama lluvia ácida A medida que se sumerge en el suelo y se acumula en las corrientes, puede cambiar drásticamente el ecosistema.
Consecuencias
A medida que el pH disminuye, las plantas y animales más frágiles pueden enfermarse y morir. Además, un cambio de pH en un cuerpo de agua puede afectar a los microorganismos que viven dentro, con efectos de dominó que pueden destruir toda la cadena alimentaria acuática.