1. Datos moleculares:
* secuenciación de ADN y ARN: Comparar las secuencias genéticas de los organismos puede revelar similitudes y diferencias, lo que indica relaciones evolutivas.
* secuenciación de proteínas: Analizar las secuencias de aminoácidos de las proteínas también puede revelar relaciones evolutivas.
* Análisis del genoma: Comparar genomas enteros permite una comprensión más integral de las relaciones evolutivas.
2. Datos de desarrollo:
* Desarrollo embrionario: Comparar el desarrollo embrionario de los organismos puede revelar similitudes que apuntan a la ascendencia común.
* Ontogeny: Observar las etapas de desarrollo de un organismo a lo largo de su ciclo de vida puede proporcionar información sobre su historia evolutiva.
3. Datos de comportamiento:
* Comunicación: Métodos de comunicación similares pueden indicar ascendencia común.
* Comportamiento social: Observar estructuras e interacciones sociales puede revelar relaciones evolutivas.
4. Datos fósiles:
* Registro fósil: Examinar fósiles puede revelar las características físicas de los organismos extintos y sus relaciones evolutivas.
* Estratigrafía: La posición de los fósiles en las capas de rocas puede indicar su edad e historia evolutiva.
5. Datos biogeográficos:
* Distribución de especies: Estudiar la distribución de especies en todo el mundo puede proporcionar pistas sobre su historia evolutiva.
* Drift continental: El movimiento de los continentes a lo largo del tiempo puede explicar la distribución de especies relacionadas en diferentes masas de tierra.
6. Datos ecológicos:
* Preferencias del hábitat: Preferencias de hábitat similares pueden indicar ascendencia compartida.
* Relaciones tróficas: Examinar las relaciones de alimentación puede revelar conexiones evolutivas.
Al combinar datos de estas diferentes fuentes, los científicos pueden crear una comprensión más integral de las relaciones evolutivas y crear árboles filogenéticos, que son diagramas que muestran la historia evolutiva de un grupo de organismos.