Así es como funciona:
* Evidencia fósil: Darwin observó fósiles de organismos extintos, mostrando que las formas de vida habían cambiado con el tiempo. Vio evidencia de formas de transición, insinuando un cambio gradual.
* Organismos modernos: Darwin también estudió organismos modernos, señalando variaciones dentro de las especies. Reconoció que estas variaciones podrían ser ventajosas o desventajosas en diferentes entornos.
* Herencia de rasgos: Darwin no entendió completamente el mecanismo de herencia, pero sabía que los rasgos se transmitían de los padres a la descendencia. Presumió que estas variaciones, influenciadas por el medio ambiente, podrían transmitirse.
* Selección natural: Darwin concluyó que las personas con rasgos ventajosos tienen más probabilidades de sobrevivir y reproducirse, pasando esos rasgos ventajosos a su descendencia. Con el tiempo, este proceso de selección natural conduce a cambios en la población general, impulsando la evolución.
En resumen, la teoría de la evolución de Darwin por la selección natural establece que los cambios genéticos (variaciones) se transmiten a través de la herencia, y esos cambios que proporcionan una ventaja de supervivencia tienen más probabilidades de transmitirse a las generaciones futuras, lo que lleva a la evolución gradual de las especies.