* fósiles: Los fósiles proporcionan un registro de vida en la tierra durante millones de años. Muestran un cambio gradual en los organismos a lo largo del tiempo, con formas de vida más simples que aparecen anteriormente y más complejas aparecen más tarde. Esto respalda la idea del cambio gradual y la evolución.
* Organismos modernos: La diversidad de la vida en la Tierra hoy, con sus diferentes especies, puede explicarse por el proceso de evolución. Los organismos comparten antepasados comunes, pero con el tiempo han evolucionado para adaptarse a diferentes entornos.
* Cambios genéticos: La evolución es impulsada por cambios en el material genético de los organismos. Estos cambios pueden ser causados por mutaciones, que son cambios aleatorios en la secuencia de ADN.
* herencia: Se pueden transmitir mutaciones beneficiosas a la descendencia, dándoles una mejor oportunidad de supervivencia y reproducción. Esto significa que los cambios genéticos son heredados por generaciones posteriores.
Así es como se conectan estos puntos:
1. Los fósiles demuestran cambios con el tiempo: Esto sugiere que los organismos no son fijos, sino que cambian en generaciones.
2. Los organismos modernos muestran diversidad: Esta diversidad es el resultado de estos cambios que se acumulan con el tiempo.
3. Los cambios genéticos son la fuente de variación: Estos cambios crean nuevos rasgos que pueden ser ventajosos o desventajosos en un entorno particular.
4. Los cambios heredados conducen a la evolución: Se transmiten cambios beneficiosos, lo que permite que las poblaciones se adapten y evolucionen durante las generaciones.
Por lo tanto, los fósiles y los organismos modernos proporcionan evidencia del concepto de evolución por selección natural, que se basa en la idea de que los cambios genéticos son heredados por las generaciones posteriores.