Existe una serie de factores que pueden influir en la selección natural, entre ellos:
* El medio ambiente: El entorno puede cambiar con el tiempo, lo que puede cambiar qué rasgos son beneficiosos. Por ejemplo, un cambio climático podría hacer que sea más beneficioso para los animales tener un pelaje más grueso o poder migrar a un clima más cálido.
* La población: La población de organismos también puede influir en la selección natural. Por ejemplo, si hay muchos organismos que compiten por los recursos, entonces es más probable que se seleccionen los rasgos que ayudan a los organismos a competir por los recursos.
* La especie: La especie de organismo también puede influir en la selección natural. Por ejemplo, algunas especies de animales pueden tener más probabilidades de ser depredadas que otras, lo que puede conducir a la selección de rasgos que ayudan a los animales a evitar a los depredadores.
La selección natural es una fuerza poderosa que ha dado forma a la evolución de la vida en la Tierra. Es responsable de la diversidad de vida que vemos hoy y seguirá dando forma a la evolución de la vida en el futuro.