Tradicionalmente, los campos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) han estado dominados por los hombres. Durante varios años, ha habido una subrepresentación de mujeres en las carreras STEM. Varios factores que contribuyen a la segregación de género incluyen los estereotipos culturales de género, los prejuicios sociales, las prácticas educativas, la falta de mentoras y los desafíos para conciliar la vida personal y laboral. Se están realizando esfuerzos para alentar y apoyar a más niñas y mujeres para que sigan educación y carreras STEM.