Las células NK forman parte del sistema inmunitario innato. Crédito:NIAID
Poco se sabe hasta la fecha sobre cómo las células asesinas naturales (NK) del sistema inmunitario detectan qué células han sido infectadas con el SARS-CoV-2. Un equipo internacional de científicos dirigido por investigadores del Karolinska Institutet ahora muestra que las células NK responden a cierto péptido en la superficie de las células infectadas. El estudio, que se publica en Cell Reports , es una pieza importante del rompecabezas en nuestra comprensión de cómo reacciona el sistema inmunológico al COVID-19.
Las células NK son glóbulos blancos que forman parte del sistema inmunitario innato. A diferencia de las células de la defensa inmunitaria adaptativa, son capaces de reconocer y matar las células cancerosas y las células infectadas por virus inmediatamente sin haberlas encontrado antes. Esta capacidad está controlada por un equilibrio entre los receptores de activación e inhibición de las células NK, que pueden reaccionar a diferentes moléculas en la superficie de otras células.
El virus es revelado por un péptido
Un nuevo estudio muestra por qué ciertas células NK se activan cuando se encuentran con una célula infectada con SARS-CoV-2. Las células infectadas contienen un péptido del virus que desencadena una reacción en las células NK que portan un receptor particular, NKG2A, capaz de detectar el péptido.
"Nuestro estudio muestra que el SARS-CoV-2 contiene un péptido que las moléculas muestran en la superficie celular", dice Quirin Hammer, investigador del Centro de Medicina Infecciosa (CIM), Karolinska Institutet. "La activación de las células NK es una reacción compleja, y aquí el péptido bloquea la inhibición de las células NK, lo que les permite activarse. Este nuevo conocimiento es una pieza importante del rompecabezas en nuestra comprensión de cómo reacciona nuestro sistema inmunológico en la presencia de esta infección viral".
El estudio fue una importante colaboración entre el Instituto Karolinska, el Hospital Universitario Karolinska y laboratorios de investigación y universidades en Italia, Alemania, Noruega y los EE. UU. La primera fase fue probar su hipótesis usando simulaciones por computadora que luego se confirmaron en el laboratorio. La fase decisiva fue la infección de células pulmonares humanas con SARS-CoV-2 en un ambiente controlado, con lo cual los investigadores pudieron demostrar que las células NK con el receptor en cuestión se activan en mayor grado que las células NK sin él.
Monitoreo de nuevas variantes de virus
"Estos hallazgos son importantes para nuestra comprensión de cómo las células inmunitarias reconocen las células infectadas con el SARS-CoV-2", dice el Dr. Hammer. "Esto puede volverse significativo al monitorear nuevas variantes de virus con el objetivo de determinar qué tan bien responde el sistema inmunitario a ellas".
El estudio ahora está siendo seguido con la ayuda de un biobanco en el Hospital Universitario Karolinska y el Instituto Karolinska que contiene muestras de sangre de más de 300 personas tratadas por COVID-19 durante la primera ola de la pandemia.
"Examinaremos si la composición de las células NK que tiene una persona contribuye a la gravedad de sus síntomas cuando se infecta con el SARS-CoV-2", continúa.