Los investigadores del Brigham and Women's Hospital han discernido que las diferentes funciones de los tejidos surgen de una maquinaria biológica central que se comparte en gran medida entre los tejidos. en lugar de sus propios reguladores individuales. En un artículo publicado en Informes de celda , Kimberly Glass, Doctor, de la División de Medicina de Redes de Channing, y su equipo explican cómo han utilizado PANDA (Passing Attributes between Networks for Data Assimilation) para crear modelos de red de las interacciones entre factores de transcripción y genes. encontrar que la presencia de diferentes funciones tisulares es el resultado de sutiles, cambios específicos de tejido en una red reguladora. Para cada una de estas funciones específicas de tejido, la red tiene los mismos componentes centrales, pero se combinan de diferentes formas con información genética y ambiental adicional. El equipo analizó datos del consorcio Genotype-Tissue Expression (GTEx), entre otras fuentes de información regulatoria, reconstruir y caracterizar redes reguladoras de 38 tejidos.
PANDA, un modelo creado por Glass y su equipo en 2013, fue calificado de manera única para esta investigación porque puede modelar con mayor precisión las interacciones entre los factores de transcripción, lo que ayuda a controlar dónde, cuándo y en qué medida se activan los genes y sus objetivos. Resumir las complejas interacciones entre los factores de transcripción y los genes es un paso importante en la comprensión de los patrones en la red que informan cómo la regulación de los genes da lugar a una variedad de funciones específicas de los tejidos.
Los autores también observaron que la regulación de la función tisular específica es en gran medida independiente de la expresión del factor de transcripción. Señalan que hay aproximadamente 30, 000 genes en el genoma humano, pero menos de 2, 000 de ellos codifican factores de transcripción.
"Es necesario realizar una gran cantidad de procesos para que un tejido funcione correctamente, ", dijo Glass." En lugar de activar factores de transcripción particulares para llevar a cabo estos diversos procesos, encontramos que las redes que conectan estos reguladores con sus genes diana se reconfiguran para coordinar de manera más eficaz la activación de esas funciones tisulares ".
El equipo señala que su trabajo destaca la importancia de considerar el contexto de tejidos específicos al desarrollar terapias con medicamentos. Dado que las redes reguladoras desplazadas gobiernan diferentes funciones, esto será importante para comprender los posibles efectos secundarios de los medicamentos fuera del tejido diana.