* Cambio constantemente: Las nubes están formadas por pequeñas gotas de agua o cristales de hielo suspendidos en el aire. Estas gotas evaporan, se condensan y se mueven constantemente debido a las corrientes de aire, el viento y los cambios de temperatura.
* No hay límites definidos: Las nubes no tienen bordes claros. Se mezclan con el aire circundante y su forma y tamaño cambian constantemente.
* Densidad variable: La concentración de gotas de agua o cristales de hielo dentro de una nube puede variar. Algunas áreas pueden ser más densas, lo que lleva a una parte más visible de la nube, mientras que otras áreas pueden ser menos densas y menos visibles.
Entonces, si bien podemos medir el tamaño y la forma de una nube en un momento particular, es importante recordar que su volumen cambia constantemente.